El pasado nueve de noviembre Bon Iver deleitó a cientos de espectadores en el mismísimo Wizink Center, recibiendo ovaciones de varios minutos entre sus grandes temas como pueden ser «Skinny Love» o «Hey, Ma».
El artista norteamericano Justin Vernon, acompañado de 5 personas más, todos tocando más de un instrumento, se hicieron con el escenario madrileño después de tres largos años de espera y tres aplazamientos de la gira.
La banda poseía una cuidadísima puesta en escena, con una iluminación con diferentes colorimetrías y juegos con leds y espejos reflejando los halos de luz que sorprendieron a todos creando una atmósfera y ambiente distinto según la canción. Además, los artistas dejaron boquiabiertos al público madrileño con la creación de los loops en directo, mostrando el proceso creativo de la canción en vivo y en directo.
En conclusión, una noche llena de magia y arte audiovisual que no todos los artistas pueden ofrecer.