Tras la resaca y la fiebre pegadiza de Bad Gyal, el quinteto madrileño llegaba para colocar su propuesta indie-rock sobre el césped de un campo que les esperaba con los brazos abiertos.
Hace dos años IZAL colgaba el cartel de entradas agotadas para el céntrico estadio madrileño Wizink Center. El pasado 31 de julio hacía lo mismo en el Wanda Metropolitano, que tuvo que esperar 20 minutos más de lo previsto para poder ver a la banda en acción.
“Creo que necesitamos un poco de autoterapia”, afrmaba el frontman nada más terminar de entonar el recentísimo single ‘Meiuqèr‘. Su verso “Que no haya mañana, solo aquí y ahora” se cumplía a la perfección esa noche, que se disponía a poner el broche final en la etapa de su cuarto disco.
Con Mikel Izal al frente, la banda recorrió toda su discografía; sonaron cortes de “Magia & Efectos Especiales” (entre ellos el que da nombre al disco, ‘Tu Continente’ o el hit innato al ukelele, ‘Qué Bien’) y otros que se han convertido en marca de la casa en los que IZAL no tuvo más remedio dejar cantar a los asistentes, como ‘Copacabana’ o ‘Pequeña Gran Revolución’ junto a la albaceteña María Rozalén.
Viajaron a 2015 y el público demostró que, seis años atrás, también estaba ahí, cantando a pleno pulmón canciones como ‘El baile’ o ‘Los seres que me llenan’ a la vez que el Wanda adoptaba un color verdoso con un destacable juego de luces.
La ronda de aplausos retumbaba en los asientos y daba paso a ‘Arte Moderno’ a dúo entre Mikel e Iván Mella a las teclas. Un visual del actor Jaime Lorente y la actriz María Pedraza daba paso a la conexión con Sidonie para interpretar ‘Temas Amables’.
El público habló y ‘Despedida’ sonó; aún quedaba IZAL para rato, con sorpresas como Mäbu, con la que la banda se alió para interpretar ‘El Temblor’ o Zahara, cuya voz casó a la perfección con la de Mikel y el público, que eufórico entonó ‘La increíble historia del hombre que podía volar pero no sabía cómo‘.
‘Bill Murray’ vino acompañada de la presentación de turno de los miembros. Recordamos que IZAL lo forman Mikel Izal al micrófono y guitarra, Alberto Pérez también a la guitarra, Emanuel Pérez “Gato” al bajo, Alejandro Jordá a la batería e Iván Mella hace suyas las teclas.
‘El Pozo’ y ‘La mujer de verde’ cerraban una noche y un ciclo que durante un mes ha demostrado que la cultura es segura y puede seguir adelante. El Wanda dejaba de lado su fanatismo por el color rojo para teñirse de verde e invitar a moverse al público con ‘El Baile’, que junto a Enrique Bunbury y ‘Pausa’ concluían una noche llena de magia y efectos especiales.