Desde 2015, con Art Angels, no teníamos un álbum de la artista y productora canadiense que tanto ha dado que hablar en estos últimos años. Su relación con Elon Musk, su embarazo y varias entrevistas controvertidas le han puesto en el ojo del huracán mediático, pero no por ello ha intervenido en su calidad musical, sino que le ha ayudado a aprender a mejorar. Con Miss Anthropocene, Grimes ha alcanzado un nuevo nivel musical, sobre todo en conocimientos de producción. Sus vídeos musicales tampoco se han quedado atrás.
En comparación con anteriores trabajos, estamos ante uno de sus discos más oscuros, alejándose bastante del tono art pop de Art Angels, sin olvidarlo completamente, y mezclándolo con un sonido más propio de trabajos anteriores, como Visions de 2012, el álbum que le catapultó al reconocimiento.
Canciones como So Heavy I Fell Through the Earth, Delete Forever o New Gods son un reflejo del espectro vocal que la artista ha alcanzado con este nuevo disco, donde se atreve a establecer su voz como elemento principal a diferencia de otras composiciones. El disco tiene sus páramos más tenebrosos, con My Name is Dark que en un principio se iba a llamar That’s what the drugs are for, pero que no fue un nombre muy apropiado para la discográfica. Una canción que lleva el tema de las drogas y las sensaciones que estas transmiten. También lo vemos presente en Delete Forever, canción que fue realizada el día de la muerte de Lil Peep, que afecto bastante a la canadiense y que refleja el uso de las drogas, sobre todo el opio, por parte de sus amigos.
En sí, el disco trata el tema del cambio climático, y como existe una diosa de este, Miss Anthropocene, además de otros nuevos dioses que han surgido a raíz del cambio de la sociedad. Diversos aspectos son tratados en las canciones, aunque lamentablemente este aspecto no está tan presente como parecía en un principio. El single We Appreciate Power, que al final ha quedado como un bonus al salirse del tono del disco, refleja curiosamente bastante esta narrativa en comparación.
Otra canción muy curiosa dentro del disco es 4ÆM, tema que estará dentro de la banda sonora del videojuego Cyberpunk 2077. Esta mezcla sonidos electrónicos y caóticos con un sample de Bollywood muy interesante que le da una frescura y un ritmo a la canción impresionante, perfecta para la mitad del disco.
Canciones como Darkseid, junto a la artista china PAN, You’ll miss me not around, Before the fever y Violence también destacan, con una producción exquisita. IDORU finaliza el viaje, con una bella letra en la que pese a todo Claire Boucher ama a su antítesis, Grimes, y la acepta como tal.
Pese a no ser el mejor de su carrera, estamos ante un trabajo que aporta una variedad y una personalidad tremenda a la industria musical actual. Hacen falta más artistas eclécticas, diferentes e imaginativas como Grimes, y este nuevo paso hacia delante no hace más que reforzar esta afirmación.