El pasado miércoles 4 de Julio la emisora de radio independiente ALT nos invitó a su segundo aniversario, una fiesta en la que juntarnos y celebrar que un proyecto ajeno a lo convencional como lo es este, haya tenido el éxito que ha alcanzado en un período de tiempo tan corto.
El evento comenzó a eso de las 21:00 en la sala El Sol de Madrid. Al entrar por la puerta, un halo de luz roja iluminaba la escalera, que descendía hasta la habitación disminuyendo poco a poco las barras de cobertura del teléfono hasta no quedar ninguna. Lo primero que se veía al entrar era el escenario y un letrero luminoso con el nombre de la sala. Durante unos minutos, se dejó al público llegar y posicionarse alrededor del escenario, momento en el que aproveché para pedir algo de beber y adelantarme, quedando en segunda fila. No hubo que esperar mucho más para poder ver a un tranquilo Dan Millson atravesar la cortina que separaba el escenario del backstage y preparar su guitarra, mientras sonaba una grabación que nos daba la bienvenida. Al acabar, dieron paso a Millson, cuya voz estaba perfectamente afinada alcanzando cualquier nota sin aparente esfuerzo alguno. A los seguidores de Jake Bugg les habría parecido que en cualquier momento podría haberse lanzado a cantar una versión de Lighting Bolt del cantante británico. No fue así, pero sí que nos regaló una versión lenta y experimental de Another Brick In The Wall de Pink Floyd acompañada de múltiples coros y focos verdes cambiantes, que creaban una psicodélica atmósfera. El bolo concluyó con su canción más conocida, Shine A Light, y acto seguido pudimos personificar la famosa voz femenina de ALT, que consiguió que el joven artista aportase algo de información sobre sus proyectos futuros.
Tras esto, Javier Navarro –organizador del evento–, accedió al escenario para sentarse junto a tres de los cuatro miembros de Fizzy Soup y charlar con ellos sobre temas como su modo DIY (do it yourself) de hacer música o sus giras de seis personas y una “furgo escacharrada”. Después, el grupo tocó varias canciones en acústico, acabando en el centro de un corro en la pista formado por el público y tocando al natural, sin ningún tipo de cable: dos guitarras y dos voces, marcando el ritmo con los pies. Silencio absoluto. Aquello me recordaba a la música folk de The Lumineers en sus comienzos, con polifonías vocales e instrumentos acústicos. Era notable que simplemente disfrutaban del momento, cosa que nos contagiaban al resto. Ciertamente Fizzy Soup ha sido todo un descubrimiento para mí, ya que antes no me había parado a entender la esencia del grupo o lo que pretenden transmitir. Esa noche volvieron a darle el valor tan merecido a la música en directo y a hacer las cosas con esfuerzo e ilusión. Fueron, sin duda, mis preferidos de la noche.
Navarro, tras unas pistas dadas por la misteriosa voz grabada, anunció por fin el artista sorpresa de la noche: Borja Momeó, frontman de Modelo de Respuesta Polar. Se presentó tímido –al no estar acompañado por el resto de sus compañeros– frente a una silla, un micrófono y su guitarra, aunque admitió echar de menos los conciertos íntimos después de tantos festivales plagados de gente, que resultan alienantes. Tocó unos cuantos temas que calmaron el ambiente mientras en las primeras filas todo lo que se veía eran teléfonos grabando al cantante en un momento especial como el que acontecía. Detrás de estos, un público expectante ante sus baladas cantaba a coro junto a él.
A continuación, Nacho Criado, director del podcast “Escenario Principal”, subió al escenario (valga la redundancia) para pronunciar un emotivo discurso dando las gracias a todos los que han hecho posible la emisora, incluido el público que les apoya cada día. Le ayudó su compañera Ana Medina, blogger y una parte importante de ALT. Ellos dieron paso a los cuatro miembros de Veintiuno para cerrar la noche, que tocaron varios de sus temas más sonados y anunciaron el nombre de su próximo disco: Gourmet, además de presentar una pequeña sorpresa: un tema tan nuevo como secreto. Fue una buena forma de concluir este segundo aniversario tan especial, animando a los asistentes por medio de guitarra eléctrica, teclado y Samplepad.
En definitiva, el equipo de ALT logró reunir todo lo necesario para hacernos querer volver a celebrar muchos años más escuchando la música alternativa que nos une, y espero que así sea.