Como os contábamos en anteriores noticias Sam Smith nos visitaba por primera vez en España este año con motivo del The Thrill Of It All World Tour. Ayer hacía su paso por la capital y pudimos estar allí para alucinar con el show que nos tenía guardado. El concierto comenzaba muy puntual con la actuación del telonero: Lewis Capaldi. El escocés ya se ha hecho un hueco en el panorama musical en menos de un año, y por primera vez también podíamos verle en nuestro escenario. Bruises, Fade Away y Lost On You, fuerons algunos de los temas que pudimos disfrutar junto a él, además de una cover de la canción Issues (de Julia Michaels) en un formato más unplugged, acompañado tan sólo de una guitarra y un piano que inundaban junto a su voz el antiguo Palacio de Deportes. Sin duda, un artista que tendremos en el radar de novedades porque ya decimos que promete.
Con un minuto de cortesía de las ya dadas 21.30, las luces se apagaban y el público comenzaba a enloquecer. El hecho de haber llenado todo el recinto de la pista de sillas no iba a impedirnos a nadie quedarnos sentados durante toda la noche.
Piano y violonchelo junto a cuatro coristas gospel esperaban al pie de escenario para recibir a Sam que salía por una plataforma sentada en una silla tal y como se retrataba en su primer álbum de estudio, The Lonely Hour. Mientras subía ya podíamos ir escuchando Burning y One Last Song, dos de los hits de este nuevo trabajo que nos traía a finales de 2017.
“¡Hola Madrid!” – nos gritaba este dándonos la bienvenida a su show – “Ansiaba venir a España y poder tocar aquí con todos vosotros.” Con estas palabras daba paso a una de los temas más sonados del británico de su primer trabajo: I´m Not The Only One.
“Cuando decidí que quería hacer un tour por todo el mundo presentando este nuevo trabajo, me planteé si la gente vendría, porque mis temas son muy tristes, y no quería que la gente saliera deprimida de un concierto.” – nos contagiaba la risa este. “Pero aunque haya temas muy tristes, vamos a pasárnoslo bien, bailar y cantar mucho, aunque nos os sepáis la letra, ¿estáis listos?”
A partir de aquí, el cantante daba un giro completo al setlist que todos esperábamos y nos hacía cantar temas de lo que fue su primer EP. Lay Me Down, Omen y Nirvana nos hacían levantarnos del sitio y movernos un poquito, aunque este no fuera el concierto indicado, Smith hizo todo lo posible para hacernos mover el esqueleto, y lo terminó consiguiendo.
I´ve Told You Now nos devolvía a ese ritmo lento que pasaba a una intro instrumental a violonchelo que nos introducía Writing´s On The Wall, el tema que le daba el Oscar a este por mejor banda sonora a la película 007: Spectre. Con una cover de Disclosure del famoso tema Latch, volvía el ritmo algo más movido con el tema Money On My Mind en una versión de a guitarra y Like I Can.
Restart hacía mención literal a lo que venía, otra parte algo más lenta y tranquila con Baby, You Make Me Crazy, Say It First, Scars y Midnight Train. HIM empezaba con una frase con la que nos animaba a todos nosotros a ser como quisiéramos. “Soy un hombre orgulloso de ser gay, y si vosotros estáis orgullosos de ser como sois, levantad las manos”: y así comenzaba. Unas luces multicolores terminaban con el tema haciendo así la bandera LGTB alrededor de todo el estadio, haciendo a todo el mundo gritar de emoción y orgullo de ser quien era. Con HIM y Too Good At Goodbyes nos despedíamos de Sam por un momento.
Momento en el que la pirámide que completaba la impresionante escenografía se comenzaba a desplegar dejando ver una escalera dorada de caracol en la que esperábamos mientras lo veíamos subir a Palace, un dueto que interpretó junto a su corista Lucy.
Stay With Me nos iba cantando la despedida de este en el escenario y nos emocionaba mientras corazones rojos caían desde el techo convirtiendo el tema en algo más emotivo por si no era poco ya.
El cantante desaparecía otra vez, haciendo que lo recibiéramos de nuevo en el escenario agitando las linternas de los móviles, un gesto de lo más emotivo.
Y aquí llegaba el ultimo single de The Thrill Of It All: Pray. Esta vez sin la colaboración del rapero Logic, pero que no echamos de menos. “Todo el mundo reza al fin y al cabo. Gracias Madrid. Espero veros muy muy pronto.” – mientras el hubo lo hacía descender sentado en la misma silla en la que había comenzado el show.
Una escenografía sencilla, para un artista como lo es Sam Smith, que tan sólo con una nota ya puede llenar salas de conciertos y enamorar a las casi 10000 personas que pudimos disfrutarlo ayer. Un artista que promete lo que vende, un disco hecho directo y un directo hecho disco.