Poco después de haber sacado a la venta su primer álbum de estudio “Feels Like Air”, ISLAND ha actuado en Madrid este viernes para presentarlo y de paso estrenarse en nuestro país. Lo han hecho en la Costello Club, una sala muy íntima en la que todos pueden verse las caras mientras disfrutan de buena música como la que nos regalaron los integrantes del grupo. Los cuatro miembros recorrieron la sala abriéndose paso entre los asistentes y, tras unos minutos, salieron del vestuario para colocarse en sus puestos comenzando el bolo con la canción Ride, conocida por todos y en la que Jack Raeder (guitarra) se lucía bordando los riffs como si no tuviesen ninguna dificultad .
El público no llegaba a las treinta personas, pero las presentes eran suficientes para llenar de energía la sala, que al ritmo de los punteos y la batería marcaban el compás. Tras la primera canción, Rollo Doherty (voz) saludaba al público agradeciendo su asistencia con la ayuda de James Wolfe (bajo), que entre risas trataba de hablar español con su acento londinense calificando el estar con nosotros en Madrid como “increíble”, literalmente.
En un momento dado el frontman empezó a introducir al resto de los integrantes, que eran recibidos vivazmente entre aplausos y pitidos antes de continuar con el setlist. Algunos temas que resonaron en la sala fueron Dreaming Of, la maravillosa Stargazer —parte de su primer EP “Girl”— o Try, uno de sus temas más sonados.
Se veía un grupo entregado a su público y viceversa, disfrutando el momento y viviéndolo como una pequeña familia llena de buen rollo. Después de varias canciones “antiguas” dieron paso a las más recientes empezando por Interlude. The Day I Die, más cañera que el resto del álbum –que está caracterizado por su ritmo pausado, aunque intenso– y Horizon fueron otros temas que pudimos disfrutar. Rollo anunciaba la siguiente canción que, como él mismo decía, le da nombre al álbum recién publicado. Feels Like Air se sentía como una bocanada de aire puro entre el público vibrando contra las paredes e hipnotizando al personal, destacando los silencios por encima de las notas. Una ovación por parte del público concluía el tema dando paso al anunciado como último: Spotless Mind, el cual tocaron con especial sentimiento y culminaron con un final apoteósico en el que Toby Richards (batería) dio todo de sí incluso levantándose de su banqueta para dar el último golpe de platillos. Los bromistas de Rollo y James se marcaron un “Nirvana” haciendo el ademán de golpear la guitarra y el bajo contra el suelo, pero dejándolos cuidadosamente sobre él entre risas. Tras esto, los miembros del grupo se dirigieron rápidamente hacia la zona de merchandising –como acababan de comunicar– para proceder a vender algunos discos y camisetas, además de entablar conversación con los asistentes al evento.
El concierto terminó a las 23h como habían establecido previamente. Fueron 60 minutos el tiempo que nos dedicaron, además de los momentos de meet and greet que nos concedieron después. Sin duda ISLAND es un grupo muy recomendable para los amantes de la música indie, las guitarras y los conciertos íntimos. Pero sobre todo para verlos en directo, ya que no es sólo buena música lo que vas a presenciar, sino también risas, “colegueo” y la sensación de haber aportado tu granito de arena al proyecto que estos chicos tienen entre manos.
Si te has quedado con ganas de verlos, aún puedes localizarlos en alguna de las ciudades de Reino Unido que visitarán próximamente durante su gira. Sigue al grupo en Twitter, Instagram y Spotify para no perderte nada.