Con una ligera brisa de una noche de verano, entre los nervios de los más fanáticos Leiva aparecía sobre el escenario de “Cultura inquieta” acompañado por su “Leiband” dispuesto a dar dos horas de un gran espectáculo, que comenzarían con “El Último Incendio”.
Dando las gracias a todos los que se daban cita en el polideportivo de San Isidro en Getafe y aludiendo al ascenso del equipo de dicha localidad, el madrileño introducía “La Lluvia en los Zapatos” seguida del tema de Pereza “Animales”.
El público comenzaba a rozar el éxtasis con un inicio tan potente, que se dejaban contagiar por los bailes del dúo de viento de la Leiband al ritmo de “Guerra Mundial” y para continuar con canciones del segundo álbum como “Mi Mejor Versión”; “Palomas” y “Los Cantantes”. Esta última servía como preámbulo para el homenaje a Chuck Berry realizado en “Sixteen”.
Sin duda, sabemos que Leiva ha evolucionado musicalmente y ha conseguido conectar con la audiencia aún más. Ese contraste queda reflejado con “Eme” y “Breaking Bad”; de esta forma los asistentes se sentían parte de esa Leiband. Acudiendo a “Miedo” o “Ciencia Ficción” antes de llegar al momento más importante del concierto.
Sin duda, nos encontrábamos ante la piedra angular de esta gira, entre un riff de lo más típico de Pereza sonaba “Superhermanas”; seguido de un momento acústico para intimar en el “Vis a Vis” y en ese ambiente orgásmico rescatar del tintero “Aproximación”.
Pero no debemos olvidar que la gira corresponde a su último trabajo, continuando con la intensidad de “Monstruos”; “Electricidad”; dando un respiro al disco con “Como Lo Tienes Tú” y cerrando el círculo con “Medicina”.
Llegamos sin duda a uno de los momentos finales con “Terriblemente Cruel” y “Mirada Perdida”; en esta última, el madrileño presentaba a todos sus acompañantes en el escenario. Tras el estribillo final desparecían del escenario, pero entre la oscuridad de los focos apagados y los gritos de los fans, se volvían a posar del escenario. Contrastando con un final de traca liderado por “Sincericidio” y finalizado en la compañía de Lichis para tocar “Lady Madrid”
Acabábamos de presenciar en dos horas algo que para nuestras cabezas se vivió como 10 minutos, logrando una conexión artista-escenario-fan difícil de lograr en pocos espectáculos.